Los recuerdos de mi mente

                          

                      Cuidaba los bosques con esmero, pues ese era su hogar, tenia orejas puntiaguadas con las que a menudo la confundían con una elfa y unas preciosas alas transparentes llenas de brillantina que dejaba caer sobre las flores mas bellas. Se vestía de hojas que cambiaban de color según las estaciones del año y su larga melena rubia iba adornaba de diademas de violetas entrelazas con rosas rojas. Eriel era la ninfa de los bosques. La diosa de ese paraíso eternal, en ocasiones se presentaba a la gente perdida para ayudarles pero no dejaba que la miraran a los ojos cristalinos, pues conducían a la locura.