martes, 7 de junio de 2011
Nunca tubo miedo, cuando eramos pequeños en días de tormentas mientras todos nos agrupabamos debajo de las sabanas, el se asomaba a la ventana y sonreía viendo como se iluminaba la ciudad a causa de los relámpagos. Solíamos escondernos vestidos de fantasmas con sabanas viejas y sucias para asustarle y aunque lo cogiéramos desprevenido siempre reía, no temía a los insectos, ni a les películas de terror que veíamos sin permiso de los padres, tampoco a los tiburones del aquarium y nunca miraba bajo la cama ni dentro del armario por si se asomaba algún monstruo. Era el único niño que conocía sin miedo. Pero cuando nos hicimos mayores lo comprendi todo, su mayor y único miedo era perdernos, enfrentarse a la vida solo sin sus amigos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ese chico tiene miedo a cosas reales. Ese chico es genial. Un beso.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo con Cris* esos si son miedos reales, pero tambien son unos enemigos que a veces nos impiden hacer muchas cosas....
ResponderEliminarMe ha encantado :)
*Besos