Su alma frágil se quebraba al igual que una hoja seca, el adiós mas amargo la estaba atormentado y ni las lágrimas podían calmar tanto dolor, se consumía en vida y el poco aire que le quedaba salia en forma de vaho por su boca sangrienta. La sangre acompañaba a la nieve en esa tarde en que Ele se encontró cara a cara con el mismo infierno, aquel que llamaban invierno sangriento
Crudo escrito; aun así, tan impactante como siempre! :)
ResponderEliminarJoana
Tienes un regalito en el blog;)
ResponderEliminarhttp://lasmejorescosasalamanecer.blogspot.com.es/2013/01/premio-one-lovely-blog-award.html
Joana